Por María Catalina Rojas Hurtado, Directora de Foocus Comunicaciones Integrales

Durante el pasado Freedom Camp en la ciudad de Cali, en la que se dieron cita numerosos profesionales de la belleza, las entidades Ecuatorianas ANAE Y OCCE otorgaron a Martin Vidal el reconocimiento Inchi Maki.

Este es un reconocimiento que las entidades mencionadas, autorizadas por los ministerios de educación y del trabajo en Ecuador, dan a una sola persona por año en los países en los que intervienen como aliados de eventos educativos, de capacitación y de emprendimiento.

ANAE, cuya sigla significa Asociación Nacional de Artesanos del Ecuador, es una entidad que busca fortalecer al gremio artesanal ecuatoriano mediante certificaciones, convenios con instituciones educativas y profesionales para capacitación y crecimiento, e incursión en plataformas tecnológicas y de conocimiento como el metaverso. Esta asociación busca integrar a los artesanos y ofrecerles beneficios académicos y profesionales, además de promover el conocimiento y la innovación en el sector. La OCCE por su parte, es un organismo certificador de Capacitación y Comercio del Ecuador.

Este segundo semestre del año ha estado muy marcado por eventos educativos del gremio de la peluquería con trascendencia internacional, en los que Martin Vidal ha sido figura y motivo de congregación de los profesionales de este arte, que ven en él no solo a un gran maestro, sino a un ejemplo qué seguir, tanto por su destreza con las tijeras, como con su visión como empresario de este gremio.

No hay mejor lugar para Martin Vidal que un escenario educativo. Sus ganas de enseñar siempre superan a cualquier otra ambición que tenga como empresario de este gremio.

Y es que si se trata de escoger entre facturar en su puesto de trabajo o tomar un avión para compartir lo que sabe, ya todos los que lo conocen saben lo que decidirá, y muchas veces su equipo en Bogotá debe aplazar su apretada agenda en la sede de Chicó porque estudiantes de diferentes países, ávidos de aprender las nuevas tendencias globales, viajan a eventos como este “Freedom Camp” de Cali, solo para verlo desenvolverse entre tinturas, tijeras y secador con modelos que se pelean por sentarse en su silla sin siquiera saber qué tenga Martin planeado para su look.

Y no es que no disfrute su trabajo en la peluquería, lo hace y mucho. El es de esos afortunados que aman hacer lo que hacen y se ganan la vida sin que las largas y agotadoras jornadas le roben la sonrisa. Pero de nuevo, su pasión sin lugar a dudas es enseñar; lo cobija un alma de maestro superior, un aura que contagia a los demás y solo por esa razón es que sus consentidas clientas lo esperan con resignación y admiración al mismo tiempo. 

El Freedom Camp es mucho más que un evento: es una experiencia creada para quienes viven la peluquería y la belleza con pasión. En este evento, los profesionales del sector se reúnen para aprender, conectar y descubrir nuevas herramientas que impulsen su talento y su marca personal. Es un encuentro formativo y vivencial para los amantes del estilismo, en el que pueden encontrar inspiración, actualizar sus conocimientos y fortalecer su crecimiento profesional y empresarial.

La versión 2025 tuvo lugar en El Edén Resort, una hacienda de Cali, donde estilistas, barberos y especialistas de la belleza vivieron 4 días de formación de alto nivel en un entrono único de tricología, belleza y crecimiento. 

ANAE, representando a los empresarios de la belleza de Ecuador, viajó a Colombia para participar en el primer Encuentro Binacional Freedom Camp en el que se destacó también la participación de otras figuras como Abel Malavé, quien presentó las oportunidades para convertir a artesanos en empresarios. El propósito de fondo con el encuentro fue unir a estilistas de Colombia y Ecuador para compartir conocimientos y crecer profesionalmente y se centró en la capacitación internacional y la certificación de profesionales en áreas como colorimetría y el arte de uñas.