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Peluquería de autor: Corto y Divino

¿Con ganas de un cambio radical? Analicemos si te queda bien un "cortico".

Sí, tranquila, existe un truco de expertos en peluquería para analizar si a tu rostro le irá bien un look bien cortico. Solo pídele a tu peluquero que aplique en tí la regla de oro, o haz el ejercicio tu misma frente al espejo.

No somos pocas las que hemos fantaseado con la idea de cortarlo, pero de verdad. Y una y otra vez hemos llegado con ahínco a la silla de nuestro estilista y a última hora nos hemos echado para atrás. ¿Por qué? si ¡igual vuelve y crece! Pero lo realmente seguro es que no has pedido un análisis de tu rostro para convencerte de una buena vez.

Cortarlo de verdad puede significar varias cosas en la vida de una mujer: que empieza una nueva etapa laboral o sentimental; que deja atrás una relación que aún le duele; que quiera darle frescura a su cuerpo porque le llegaron los 50´s; que busca un look más sofisticado o elegante; o por muchas otras razones que ya cada una estará pensando mientras lee este artículo.

 

Más allá de las tendencias es fundamental apostar por un look que nos favorezca y potencie aún más nuestra propia belleza.

Otra razón y muy poderosa para pensarlo en serio es si llevas cogido el pelo todo el tiempo. Si aún teniéndolo bello, te pesa o te estorba suelto, y prefieres prensarlo hacia arriba con un caimán, quiere decir que eres buena candidata para probar un corte por encima de los hombros. Sin embargo, antes de dejar entrar las tijeras, asegúrate de que te irá bien a tu rostro, cuello y estilo de vida.

Lo único que necesitarás es pararte frente al espejo con un lápiz y una regla. La técnica es del peluquero británico John Frieda y consiste en medir la distancia que hay entre tu oreja y tu barbilla. ¿Cómo tomar esa medida? coloca el lápiz de manera horizontal en tu barbilla y la regla en posición vertical desde la oreja. Tendrás que fijarte en el punto donde coinciden la regla y el lápiz, y medir ambas distancias. Si entre las dos medidas no supera los 5,7 centímetros, podrás estar segura de que el pelo cortico te quedará divino y podrás arriesgarte con un bob o un pixie.

Antes de someterte al veredicto de las tijeras, opta por proyectar un resultado con la "regla de la regla".

En el común de las mujeres, los años pasan sin cambios radicales en su apariencia; cosa distinta sucede en Hollywood, donde, por ejemplo, ya sea por adoptar un papel o por imponer tendencia, las actrices, modelos e influencers cambian de look constantemente.

Pelo largo versus pelo corto es un eterno debate seguido de la pregunta de cuándo es momento de abandonar una larga melena. Hay quienes piensan que cortarlo es poner años en un rostro, pero no es una regla. De hecho, después de los cincuentas, la verdad es que rejuvenece, porque al enmarcar bien el rostro, el corte hace el efecto óptico de tirar de las facciones hacia arriba. Los grandes estilistas están de acuerdo: El BOB rejuvenece, resta años y suma estilo. Este look se puede llevar con ondas, con flequillo, alocado o liso, asimétrico o desenfadado y con diferentes largos, según te siente mejor. Tiene la increíble posibilidad de variaciones en cualquier momento, con capas largas o cortas, y se adapta al estilo que mejor te siente. El aire desestructurado y muy francés es una gran apuesta cuando lo cortas por primera vez. Cuando el pelo es muy fino, el corte a la altura de la nuca es genial porque le da mucho volumen, y se puede jugar con las capas que aportarán textura. Además es muy cómodo y fácil de peinar, y favorece a todos los rostros, menos a los muy redondos.

Esta es la terminología de cortes que más se llevan:

  • Shaggy: con capas que aportan movimiento, con o sin flequillo.
  • Bob: cortado en la nuca con degradado hacia arriba, y laterales más largos en diagonal.
  • Long Bob: igual que el anterior, pero más largo.
  • Midi: la media melena clásica.
  • Pixie: corto corto (laterales y parte trasera) con flequillo.

 

¿Se te vienen a la cabeza algunos cambios de looks de famosas o celebrities? Veamos unos casos y juzga tu misma si les va mejor el largo o el corto. Y luego de la inspiración, decídete tu misma a ese cambio que vienes rumiando por meses o años. Recuerda primero hacer el test de la regla de oro y luego habla con tu estilista para analizar los estilos y proyectar cuál irá mejor con tu rostro, tipo de cabello y estilo.